Albarán de la farsa

Aunque no lo parezca, no fingimos ante los otros, fingimos ante nosotros mismos. (José Saramago)

Vivimos ausentes,
descendiendo escalones
de cuadrícula en minúscula,

rezagándonos en cada rellano
para rellenar disciplinadamente
nuestro particular albarán de la farsa.

Buscamos la rutina de lo cierto en la seguridad de las mentiras,
no tanto en que lo sean como en que los demás también creen en ellas,
y ponemos mil trabas al lenguaje para que no propugne ni concite ni desvele.

Saguzarra

1 comentario:

Adriana dijo...

mayúsculo este poema

esdrújulo :D